Trabajar en la oficina de la morena con gafas Angie Noir después de la fiesta de ayer no es nada bueno. Es bueno que un colega en la cara de un niño, como un genio mágico de un cuento de hadas, resuelva estos problemas tratando gordas peludas follando al pollito con vino Togliatti. Después de tal terapia, la chica ya no está triste, sino que piensa cómo acostarse con alguien. Bueno, para qué ir lejos si el final de un camarada ya está en pleno apogeo y la joven se le entrega con el cáncer encima de la mesa.
