En toda gorditas argentinas cogiendo Rusia, la gente paga en rublos, pero a Hungry Kitty se le ocurrió un tipo de pago completamente diferente para un amigo: mamadas. Y si hoy una amiga le compra algo nuevo, entonces la niña automáticamente traduce el costo en la cantidad de succiones, convirtiéndolas simultáneamente en la cantidad de relaciones sexuales vaginales y anales. Pero hoy a su amiga le espera una sorpresa: sexo genial en el probador de la sala de operaciones con una mamada y un facial impresionantes.
