Por el rabillo del oído, el joven escuchó que las damas que usan anteojos son muy apasionadas y tan pronto como ven una viejas tetonas gordas polla, inmediatamente se la llevan a la boca y hacen varias cosas vulgares con ella. Para comprobarlo, invita a una amiga del último piso a visitarla, sus gafas y su trenza son muy excitantes para un amigo, y ella misma se excita con la mamada y los polvos locos hasta tal punto que no puede contenerse, convirtiéndose en cada vez más inflamado. En fin, los chicos no mentían, y ahora el camarada solo se follará a chicas con anteojos… ¡claro!
