Encontrar pretendientes adecuados cogiendo con la gorda en un pueblo modesto donde vive la bella Katya Bloom es una felicidad indescriptible. Porque Katyukha está muy contenta con el hecho de que por la noche su padrastro venga a tener sexo con ella, y desde ayer su novio intenta conseguir su cuerpo con la firme intención de casarse. Además, la madre misma no es reacia a poner a una chica debajo de su esposo, porque no tiene ganas de follarse a sí misma. Entonces, con tal abundancia de provocaciones sexuales, la niña simplemente no puede ser infeliz, sino que debe caminar todo el tiempo con una sonrisa estúpida pero feliz en su rostro.
