Alguien va al conocido Woodman, alguien toma un taxi para visitar los igualmente famosos Legals, y Alexis Crystal tomó un boleto a Tokio y se fue a conocer un país maravilloso. Por otros 30 años se habría traído de este viaje el conocido videograbador de la Funai, y ahora solo una vagina llena de gordas anales xxx semen fresco, tanto que al caminar le salpica en las bragas, como un balde lleno de agua de sus balancín. Pero este hilarante ataque de pequeños coños fue divertidísimo de ver, no semen, sino algunos efectos especiales salvajes al estilo de la película Godzilla. Sería mejor que se la follara Godzilla, por Dios.
