Rai Veness está hablando por teléfono con una amiga cuando se da cuenta de que su hijastro está dibujando algo mientras la mira fijamente. Al día siguiente, la historia se repite y la moza realmente quiere saber qué está tratando de capturar su novio. Por pura casualidad, descubre que todo este tiempo el tipo la pintó ella misma, porque en el proyecto escolar necesitas representar la belleza real, y para Rico Hernández no hay nadie más hermoso que su propia madrastra. Para ayudar a la sala, acepta posar y gradualmente se deshace del exceso de ropa para agradecer al artista hecho a gordas maduras peludas sí mismo con sexo caliente un poco más tarde: ¡se lo merece!
